Por Pablo González
Periodismosn.com.ar
FM 88.7 Radio City San Nicolás
La fría letra del parte policial, informa que un hombre de 34 años fue víctima de un robo cuando caminaba por el viaducto de Avenida Morteo y Nación, cuando alrededor de las 5.40 del lunes fue sorprendido por dos sujetos quienes lo intimidaron con un elemento corto punzante.
Y agrega luego el informe: «Tras resistirse al asalto, los delincuentes le provocaron una herida en zona de tórax. Le robaron el teléfono celular y la billetera con $4.000.
La víctima fue asistida en el Hospital San Felipe. El médico de policía determinó que las lesiones fueron de carácter leve. Interviene en la investigación, caratulada como robo calificado, la DDI San Nicolás y la UFI 13.
Sin embargo, hay algo que excede la mera crónica policial, y es el hecho de que la zona de los viaductos se ha convertido, en el último tiempo, en escenario de varios hechos delictivos en San Nicolás. Quizás porque -a pesar de la luminaria existente- el lugar está demasiado oscuro, o a lo mejor porque hay poco movimiento a la madrugada. O ambas cosas a la vez. Pero lo cierto es que dicha zona se torna propicia para cometer ilícitos.
No debería ser tan difícil poner fin a dicha situación. Con la mera presencia de un móvil policial en un lugar equidistante entre ambos viaductos, seguramente los delincuentes desistirían de su accionar. Y de paso, podrían poner cámaras en algún punto estratégico para poder identificar a quienes igualmente se atrevan a delinquir. Es la base de cualquier política de prevención en materia de seguridad: establecer un mapa del delito con los sitios y los horarios más frecuentes en los que se delinque, y tomar las medidas para evitarlos.
Por supuesto que el problema de la inseguridad, en términos globales, es mucho más complejo. Y que abarcar a toda una ciudad no es lo mismo que dos simples viaductos. Pero al menos podríamos empezar por los viaductos…