Los «tosedores» de Massa, la excusa de Javier Milei tras el debate presidencial

El candidato de La Libertad Avanza argumentó que hubo un «coro de tos» para desconcentrarlo. En su absurda defensa por sus yerros, hasta involucró a los organizadores del debate. “Hubo un cambio de último momento sobre la disposición de la gente y pusieron de mi lado a la gente de Massa», dijo.

Javier Milei madrugó para dar excusas por su performance inestable en el debate de anoche y responsabilizar a terceros por la cantidad de baches en su discurso. Culpó a un sector del público de hacer «un coro de tos» para desconcentrarlo y acusó a Sergio Massa haber organizado una trama con “un conjunto de psicólogos” para sacarlo «de las casillas».

«Él buscaba un desborde emocional mío y no lo logró, aún con los tosedores, es un tema no menor», subrayó en referencia a Massa y al público que acompañaba al ministro de Economía que, según dijo, “cada vez que yo tenía que hablar se dedicaba a toser”.

Es decir que, según el candidato ultraderechista, hubo una supuesta confabulación  en su contra activada por familiares, funcionarios, invitados especiales y dirigentes de Unión por la Patria (UxP) que se habrían puesto de acuerdo para tener un malestar expectorante.

Es más, arriesgó una conjetura más sobre ese supuesto complot, con el que salpicó a la Justicia Electoral, organizadora del debate: “Hubo un cambio de último momento sobre la disposición de la gente y pusieron de mi lado a la gente de Massa. Entonces, ¿qué pasa? Cuando yo hablaba, todos tosían buscando perturbarme”.

Según el candidato ultraderechista, hubo un momento puntual en que ocurrió ese hecho: “Cuando yo estoy haciendo el cierre, que es un momento muy importante, estaban todos tosiendo”, dijo durante una entrevista por Radio Mitre a primera hora del día. Lo mismo dijo también por Radio Continental, donde contó además qué pasó con pasantía en el Banco Central.

Esa es la versión que el candidato negacionista hará circular en el resto de las entrevistas en que tratará de corregir los yerros, falta de argumentaciones, silencios y explicaciones incompletas que no pudo dar durante las dos horas de debate en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA).

De la misma manera, durante la madrugada usó sus redes sociales con intentos de explicaciones de lo que dijo y no dijo durante la presentación de anoche. También posteó para criticar a Massa y llamar a votar por LLA a quienes «aún están indecisos».

Así y todo, Milei dijo haberse sentido «muy cómodo» durante el debate y consideró a que, a lo largo de los bloques, se fue «afianzando». «Terminamos muy bien», evaluó.

«Me sentí muy bien. Estuve muy cómodo y, con el correr de los bloques, me fui afianzando y terminamos muy bien», dijo y consideró haber cumplido «ampliamente» con los objetivos que se habían propuesto desde su fuerza política.

No obstante, el candidato entendió que Massa buscó «agredirlo y tratar de hacer cosas» para sacarlo «de las casillas», con la supuesta idea de mostrarlo «como alguien desequilibrado y que no está en condiciones de gobernar».

«Eso lo buscó intensamente, fue muy agresivo, tuvo frases muy ofensivas hacia mi persona», interpretó el candidato que calificó una y otra vez de “mentiroso” a Massa, a pesar de la advertencia inicial de no agredir ni descalificar al adversario.

En este punto, Milei también sostuvo que hubo una trama organizada en su contra: «Como todo el aparato juega a favor de Massa –dijo-, en su equipo tenía un conjunto de psicólogos que estaban buscando puntos con los cuales agredirme”.

“Una de las cosas que lograron –prosiguió- fue que el público que llevaba cada uno, en lugar de estar en el lugar en el que uno estaba en el atril, lo pusieron en diagonal.»

El de Massa “estaba enfrente mío y, cada vez que yo tenía que hablar, se dedicaban a toser, era un coro de tos», insistió.

Por otra parte, desde las redes sociales y de madrugada, Milei hizo lo que no pudo hacer durante el debate: advirtió a sus seguidores y a su espacio que quedan cuatro días por delante «para convencer a los que aún están indecisos».

En un posteo titulado «lo que dejó el debate» y emitido a las 4:30 de la madrugada en la red social X, sostuvo que el país se enfrenta a «una decisión muy clara» y convocó a plantear si las personas «quieren mantener este rumbo o algo distinto».

Dijo que, de cara al balotaje, «de un lado» hay «un político mentiroso, cínico, coacheado, prepotente y soberbio que cree que el Estado le pertenece; y que quiere seguir haciendo las mismas cosas que vienen fracasando hace décadas que solo benefician a los amigos del poder».  Y cerró su mensaje con lo que no pudo gritar anoche: «Viva la libertad carajo».